viernes, 13 de enero de 2012

Neurofeedback, opción contra depresión, ansiedad y otros padecimientos

• Es el monitoreo de patrones cerebrales asociados a diferentes estados de conciencia, explicó Luz María Álvarez, de la Facultad de Medicina de la UNAM
• Es una técnica no invasiva, computarizada, estimulante e interactiva, que mediante estímulos visuales y auditivos, ayuda al cerebro a mejorar su funcionamiento • También, es factible trabajar la depresión, problemas de alimentación y autismo, entre otros padecimientos

En las últimas décadas, la modernización, las modificaciones en los estilos de vida de la sociedad y la inseguridad, han provocado el incremento de padecimientos como depresión, ansiedad, insomnio y estrés postraumático.

Para contrarrestar esa problemática, la técnica neurofeedbackse ha convertido en una alternativa; no es invasiva, es computarizada, estimulante y totalmente interactiva, y mediante reforzamientos externos positivos (estímulos visuales y auditivos) ayuda al cerebro a mejorar su funcionamiento.

Luz María Álvarez, académica y coordinadora de la Investigación en Psicología de la Facultad de Medicina (FM) de la UNAM, explicó que se trata del monitoreo de patrones cerebrales asociados a diferentes estados de conciencia; esta última es como “darse cuenta”, y los patrones indican si el individuo está atento a estímulos del ambiente, o relajado.

Se aplica en los casos que se produce disregulación neuronal, e incluye el espectro ansiedad-depresión, déficit de atención, trastornos conductuales, desórdenes del sueño, dolores de cabeza y migrañas, dolor crónico, síndrome premenstrual y alteraciones emocionales. También, ayuda en algunos casos en la rehabilitación de espectro autista y parálisis cerebral.

El procedimiento, explicó, consiste en colocar sensores en el cuero cabelludo para medir la actividad eléctrica cerebral. Posteriormente, se procesa la señal en el equipo y se obtiene información sobre el funcionamiento. Se puede observar a través de un monitor qué parte de ese órgano presenta irregularidades; a continuación, se muestra el flujo al paciente y éste intenta cambiar el nivel respectivo.

Así, a quien tiene problemas de atención se le colocan los sensores en el área donde se encuentra esa función, y el individuo es capaz de mejorarla, ejemplificó.

Esta técnica se aplica, entre otros, para superar el insomnio, la depresión, problemas de atención, hiperactividad y estrés postraumático. Para ello, abundó, se colocan sensores en el lugar de la corteza cerebral donde se busca mejorar la actividad, y la computadora tiene instalado un programa que retroalimenta al paciente con estímulos visuales y auditivos si se tiene la función deseada.

Álvarez mencionó que en el caso de la ansiedad es necesario bajar la frecuencia de la actividad cerebral; entonces, si se pretende que el paciente ponga atención, tendrá que subirla.

Se trata de pequeños sensores de oro, que conducen y detectan la actividad eléctrica cerebral. Se limpia el área a estudiar, se coloca el sensor, como si fuera un electroencefalograma, pero sólo en el área a estimular o fortalecer, y el equipo provee la información y determina si está baja y no llega al umbral que se requiere; inmediatamente, la persona realiza una actividad mental para aumentarla.

El equipo de neurofeedback de la FM tiene seis secciones con dibujos; el paciente, por medio del cerebro, mueve una especie de flecha y al llegar a la cajita adecuada, el objetivo se cumple.

También, puede mover un carrito, y si la actividad no es la esperada, se detiene; entonces, el individuo debe buscar qué tipo de pensamientos provocaría el movimiento. “Se puede ayudar y aconsejarle que piense en un problema matemático o en la letra del himno nacional, pero el software lo lleva, poco a poco”.

En la UNAM, desde 1999

También sirve para el tratamiento del trastorno obsesivo compulsivo, distintos dolores como el premenstrual, y el tratamiento de trastorno por déficit de atención.

En algunos casos, el niño que padece autismo tiene un patrón cerebral muy bajo, que se estimula y se puede trabajar para que mejore su lenguaje. Asimismo, es factible tratar problemas de alimentación.

El beneficio que se logra con esta herramienta no es temporal; existen estudios que detallan que los cambios continúan, porque la persona aprende qué debe hacer.

En la UNAM, desde 1999 se trabaja con neurofeedback. La FM comenzó con un equipo muy rudimentario, comparado con el que hoy tiene. Aquí se brinda servicio a alumnos, especialmente para investigación, y para los pacientes del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental de la entidad.

Fuente: DGCS-UNAM