jueves, 8 de diciembre de 2011

Crean modelo para predecir nivel de compuestos en partículas con potencial carcinogénico

• En el CCA de la UNAM, integrantes del Grupo de Mutagénesis Ambiental, lo diseñaron con el análisis en tres zonas del área metropolitana de la Ciudad de México

Partículas suspendidas, así como su composición orgánica con potencial efecto carcinogénico, que prevalecen en el aire de la capital y su zona metropolitana, son estimadas con un novedoso modelo diseñado en el Centro de Ciencias de la Atmósfera (CCA) de la UNAM.

A partir de la masa de las partículas suspendidas en el aire de muestras colectadas en tres zonas de la capital (Tlalnepantla, la Merced y San Agustín, rumbo a Pachuca), en el laboratorio se determinan compuestos orgánicos que se adhieren a los pulmones, explicó Omar Amador Muñoz, técnico e integrante del Grupo de Mutagénesis Ambiental del CCA.

Amador Muñoz y su colegas Efrén Ospina Noreña y Rafael Villalobos Pietrini, estudian partículas respirables con diámetros menores o iguales a 2.5 µm (micrómetros) (PM2.5), porque disminuyen la eficiencia respiratoria, exacerban la ocurrencia de paros respiratorios y cardiacos, participan en el desarrollo de ateroesclerosis y causan cáncer pulmonar.

Estos efectos dependen de su composición química, como los hidrocarburos aromáticos policíclicos (HAP) emitidos, en su mayoría, por los cuatro millones de vehículos que transitan diariamente en la ciudad, y cuya importancia radica en sus efectos biológicos, pues forman aductos con el ADN y metabolitos reactivos que producen inflamación y muerte celular; actúan como modificadores endocrinos y son mutagénicos y carcinogénicos.

Además, existen otros compuestos orgánicos que afectan al clima, pues modifican el albedo de las nubes, la generación de la lluvia y la dispersión y absorción de la energía proveniente del Sol, detalló Amador Muñoz.

Análisis y modelación

Para analizar la cantidad y distribución espacio temporal de estos contaminantes en el aire metropolitano, los científicos obtuvieron de las tres zonas de la urbe muestras de PM2.5, que tienen gran capacidad de penetración en las vías respiratorias.

En su laboratorio del CCA, las someten a un tratamiento analítico y al estudio por cromatografía de gases acoplada a espectrometría de masas, técnica que separa a los compuestos orgánicos de interés y detecta y cuantifica a las moléculas ionizadas (con carga eléctrica).

Con el uso de algunos parámetros meteorológicos y contaminantes criterio de la zona noroeste (Tlalnepantla), se logró un modelo de regresión lineal multivariado para estimar PM2.5, materia orgánica y HAP no sólo para esta área, sino para el noreste y centro de la capital. Los datos estimados fueron verificados con los observados en cada sitio, con buenas aproximaciones.

El modelo permite estimar y predecir tendencias a futuro, tras conocer las concentraciones de cada contaminante, y el comportamiento de los parámetros meteorológicos en cada sitio de la metrópoli.

“Es sencillo, ha dado buenos resultados y desarrolla alertas tempranas, predicción de cancerígenos y ubica marcadores de fuentes de emisión”. El trabajo está financiado por la UNAM mediante el proyecto PAPIIT IN116810, concluyó.

Fuente:DGCS-UNAM