La mayor base de datos sobre características y funciones de plantas de los cinco continentes fue presentada recientemente en Alemania, detallando que en ese banco de información se incluye la descripción de la forma, funciones biológicas e interacciones de 69 mil de las 300 mil especies vegetales conocidas en el planeta.
El banco de datos, llamado TRY, es un proyecto de colaboración de 106 instituciones científicas del mundo y tiene como objetivo medir cuáles son los efectos que tiene el cambio climático en las interacciones de las plantas con animales, suelos y atmósfera.
Rasgos detallados
La meta es documentar funciones de las, aproximadamente, 300 mil especies vegetales conocidas del planeta. La base de datos puede ser consultada por cualquier persona en http://try-db.org/, allí se pueden leer 3 millones de rasgos detallados de los 69 mil vegetales descritos por biólogos.
Los científicos latinoamericanos que colaboran en este banco de datos son coordinados desde la Universidad Nacional de Córdoba, en Argentina y con ellos colaboran investigadores de Brasil, Colombia, Panamá y Costa Rica.
Fuente abierta de información
Otras de las instituciones que participan en la busqueda y recolección de datos para este banco de información son la Universidad de Leipzig, Alemania; la Universidad Macquarie, de Australia; el Centro Nacional de Investitgación Científica (CNRS) y la Universidad de París, Francia.
El objetivo es convertirse en una fuente de información abierta para observación y conservación de ecosistemas. Conocer la morfología y fisiología de las plantas ayuda a conocer la elasticidad y adaptabilidad que pueden tener frente a fenómenos climáticos extremos, característica conocida científicamente como resiliencia.
Asimismo ayuda a identificar la influencia que tienen el suelo, luz, agua y diferentes nutrientes en la velocidad de crecimiento o de recuperación frente a sequías, heladas o inundaciones.
Trabajo duro
“Después de años de intenso trabajo para recolectar información y desarrollar una base de datos manejable estamos muy orgullosos de contar con esta primera versión de base de datos global”, afirmó durante la presentación de la página Jens Kattge, investigador del Instituto Max Planck y principal responsable de esta herramienta.
El mismo banco de datos puede ayudar a hacer cálculos sobre captura de dióxido de carbono, para presupuestos de bonos de carbono y modelos de circulación de nutrientes.