martes, 8 de noviembre de 2011

Deben líderes subsanar deuda ecológica para garantizar economías más resilientes

WWF lanzó un llamado a la cumbre de líderes de estado del G20, que se reúne esta semana en Cannes, a ir más allá de una perspectiva financiera estrecha a los problemas económicos que el mundo enfrenta.

Para ello será esencial considerar adecuadamente los vínculos entre las causas y las consecuencias de las crisis económica y ecológica actuales que están conduciendo a un creciente número de personas en el mundo a carecer de comida, agua y energía. La atención simultánea a estas problemáticas brindaría oportunidades para subsanar la crisis financiera y garantizar economías más verdes, equitativas y resilientes, según WWF.

“Detrás de la deuda económica existe una creciente deuda ecológica. Conforme la dejemos de cubrir, requerirá mucho más que paquetes de rescate financiero para recuperar la estabilidad,” afirmó Elise Buckle, líder de campaña de WWF Internacional para el G20.

De acuerdo con WWF, existen soluciones innovadoras. Lo que hace falta es que el G20 demuestre su preocupación y liderazgo político en pro de la equidad económica mundial al largo plazo, empezando por los más vulnerables.

“A la par de buscar soluciones bancarias a la crisis, los líderes podrían buscar paquetes financieros que ayuden a generar empleos al largo plazo y que disminuyan los impactos del cambio climático en las personas y las especies, como la inversión determinada y a escala en el uso de energías renovables”, dijo Vanessa Pérez-Cirera, Directora de Cambio Climático de WWF-México.

WWF hace un llamado a los líderes del G20 para que aprovechen la oportunidad de lograr un cambio durable, estableciendo acuerdos en:

  • Fuentes innovadoras de financiamiento para el clima y el desarrollo, incluyendo un impuesto global a las transacciones financieras (FTT) y un gravamen a los sectores marítimo y de aviación internacionales. Un FTT de 0.1% generaría entre $410 mil millones y $1 billón de dólares anuales; el impuesto a los combustibles utilizados por las naves aéreas y marítimas recaudaría al menos $24 mil millones de dólares anuales para acciones climáticas.
  • La instrumentación efectiva de los compromisos anteriores, adquiridos en la Cumbre de Pittsburgh, para la eliminación gradual de los combustibles fósiles y las inversiones en acceso a energía limpia para todos y economías verdes. De acuerdo con la OCDE, se gastaron $500 mil millones de dólares en subsidios a los combustibles fósiles, tan sólo en el año 2010.
Pérez-Cirera agregó que “los líderes del G20 tienen el compromiso y la oportunidad de asegurar que el Fondo Climático Verde acordado en la cumbre de Cancún no se quede como una caja vacía y reciba los recursos financieros que tanto se necesitan para apoyar a los países en vías de desarrollo en sus medidas tanto de adaptación, como de mitigación. México, país que presidirá el G20 el año próximo, tiene la oportunidad de hacer del crecimiento verde y resiliente al clima, una de sus principales prioridades”.

Fuente: WWF