sábado, 14 de mayo de 2011

El cumplimiento de los acuerdos de Cancún transformará la economía mundial

Participó la Semarnat en la XXI Reunión del Foro Económico Mundial en Ciudad del Cabo, Sudáfrica.


Se verán modificados los patrones de producción y consumo de energía a favor del combate al cambio climático.

Alcanzar la menta de estabilizar la temperatura por debajo de los 2 grados centígrados, como acordaron los países durante la COP16, en Cancún, significará una transformación sin precedente en la economía mundial y en particular en nuestros patrones de producción y consumo de energía, señaló el Titular de la Unidad Coordinadora de Asuntos Internacionales de la Semarnat, Enrique Lendo Fuentes.

Lo anterior fue expresado por el funcionario federal durante su participación en la XXI Reunión del Foro Económico Mundial en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, a la que asistió en representación del Secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Juan Rafael Elvira Quesada.

“Después de Cancún, no hay vuelta hacia atrás. La economía mundial deberá transitar hacia un nuevo modelo en el que el crecimiento económico sea compatible con el combate a la pobreza, la inclusión social y la preservación de nuestros ecosistemas, sostuvo Lendo Fuentes, quien intervino en la Sesión Plenaria titulada “La Agenda de Durban” (Climate plenary), donde se presentaron los objetivos y situación de África respecto al cambio climático y la Décima Séptima Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP-17).

Señaló que los Acuerdos de Cancún constituyen un importante logro de la comunidad internacional, que contribuyen a afirmar la utilidad del multilateralismo; superar las divisiones entre países y grupos que prevalecieron durante 2010; definir un marco de acción para las negociaciones futuras; superar el escenario de negociación de “todo o nada”; establecer arreglos institucionales en financiamiento, adaptación y tecnología para el cambio climático, entre otros.

Asimismo, destacó la importancia que tendrá el cambio climático en la defunción de las agendas económicas global, regionales y nacionales dado los flujos de inversión que serán necesarios para cumplir con los acuerdos de Cancún tanto en el ámbito de mitigación como en el de adaptación.

Entre las decisiones de Cancún que tendrán impacto en la economía global, el funcionario federal mencionó la meta de mantener el incremento de temperatura por debajo de los 2 grados centígrados; la formalización de los compromisos de mitigación de países desarrollados y acciones nacionales de países en desarrollo; la decisión de integrar estrategias de desarrollo bajo en carbono (LEDs); la decisión de establecer estrategias para atender la deforestación y degradación de bosques (REDD plus), y los paquetes de financiamiento a corto (2010-2012; 30 mil millones de dólares) y a mediano plazo (100 mil millones de dólares al 2030) para acción climática.

El Foro contó con la participación del Presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, en cuya intervención habló del nuevo papel para el continente africano en la economía global, así como de sus expectativas como próximo Presidente de la Conferencia de las Partes de Cambio Climático (COP 17) y como miembro del grupo de países emergentes (BRICS) junto a Brasil, China, India y Rusia.

Cabe señalar que Sudáfrica ocupa el lugar once en la lista de emisores de bióxido de carbono (CO2), por delante de Francia y España, principalmente a causa del uso de carbón para la producción de electricidad. Aunque no tiene compromisos de reducciones bajo el actual Protocolo de Kioto, el Gobierno ha impulsado planes iniciales de eficiencia energética e impuestos de carbono.

Este Foro Económico concentró durante tres días a representantes de los gobiernos de las principales economías africanas y directivos de empresas locales y multinacionales, para discutir el futuro desarrollo del continente en energía, cambio climático y seguridad alimentaria. También se abordó el impacto de las decisiones del G-20 en África, la proyección del sector turístico y cinematográfico en el continente y el éxito de las empresas no financieras, que han crecido a un ritmo del 8 por ciento anual.

Fuente: SEMARNAT