Naciones Unidas (PL) Con la incorporación de India y Japón, el Protocolo de Nagoya sobre la protección de la biodiversidad agrupa desde hoy a 15 Estados parte, de los 50 necesarios para entrar en vigor.
Las nuevas rúbricas fueron impuestas la víspera en la sede de la ONU en Nueva York por Hideki Minamikawa, viceministro japonés de Medio Ambiente, y Jairam Ramesh, titular indio de Medio Ambiente y Bosques.
El documento fue abierto a la firma en febrero pasado, con la incorporación de Colombia, Brasil, Argelia y Yemen.
Luego lo hicieron México, Ecuador, Perú, Panamá, República Centroafricana, Mali, Rwanda, Seychelles y Sudán, y ya se anunció la inminente adhesión de al menos otros ocho países.
El nombre oficial del texto es Protocolo de Nagoya sobre acceso a los recursos genéticos y participación justa y equitativa en los beneficios que se deriven de su utilización.
El convenio fue concluido en una reunión celebrada en octubre pasado en la ciudad japonesa de Nagoya y tiene por objetivo la protección de las especies y los ecosistemas y repartir los beneficios de ese trabajo de forma más equitativa para el 2020.
Como uno de los aspectos esenciales, el instrumento eleva de un 13 a un 17 por ciento el total del área de tierras protegidas del planeta y de un uno a un 10 el de los océanos.
Según datos de la ONU, en el presente hay casi 48 mil especies amenazadas en todo el mundo, y 17 mil de ellas están en peligro de extinción.
Ese riesgo afecta al 21 por ciento de los mamíferos, el 30 de los anfibios, el 12 de las aves, el 28 de los reptiles, el 37 de los peces de agua dulce, el 70 de las plantas y el 35 de los invertebrados.
El texto de Nagoya incluye un plan estratégico de 10 años sobre las acciones destinadas a la salvación de la biodiversidad y al logro de las metas de la Convención sobre Diversidad Biológica, en vigor en 1993.
El mundo acaba de celebrar en el 2010 el Año Internacional de la Biodiversidad y de comenzar el 2011, dedicado a los bosques, con el objetivo de elevar la conciencia sobre la conservación y desarrollo sostenible de la floresta.
Fuente: PNUMA